
Portada del disco "Solo Marimba", de Mauricio Penagos
La música costarricense, como es el caso de la mayoría de las manifestaciones culturales del país, es una mezcla de ritmos que llegaron de muchas partes. Dentro de los más antiguos, desde luego, están el vals, que adquirió, en la ciudad de Cartago sus propias características, lo mismo que la Mazurca y la Polka, ambos ritmos provenientes, de Europa, vía España (Cataluña).
Dada la conformación etnológica del país, han confluído todo tipo de ritmos los que, en la mayoría de los casos, se han mezclado y fusionado para dar origen a nuevas expresiones musicales, con sabor autóctono. La influencia española fue abundante durante la colonia y los albores de la independencia, mientras que influencias de la música suramericana, especialmente de Colombia (cuando Panamá todavía era parte de ese país) llegaron hacia finales del SXIX. La influencia de los ritmos mexicanos fue relativamente tardía, en los albores del Siglo XX.
Según Alpírez, se pueden identificar cuatro regiones bien marcadas en donde se produce música folclórica: Guanacaste (guanacasteca), los Valles Centrales (aldeana), Limón (limonense), San Isidro de El General (generaleña).
Descripción de algunos de los ritmos de la música típica y folclórica
Aire nacional:
Es un ritmo muy acompasado, con lejanas reminicencias del vals, aunque mucho más lento. La canción más representativa de este género es “La guaria morada”, de Roberto Gutiérrez Vargas y Carlos López (los Talolingas)
Balada tica:
El género de la balada es de los más antiguos en la música universal, con reportes bibliográficos, por lo menos, que lo remontan al Siglo XIV, en Europa. Lo más común, sobre todo en la balada moderna, es que sean canciones románticas o de despecho, de ritmo suave y con ciertos estribillos. Son muchos los compositores nacionales que han incursionado en este género. Como ejemplo, una balada que clasificaría en el género folklórico costarricense, es “Mundo de amigos”, de Abdenago Torres (Nago de Nicoya)
Bolero nacional:
Al igual que la balada, el bolero es originario de Europa. Llegó a América, traído por los españoles, primeramente a Cuba, en el Siglo XIX, en donde tuvo una amplia difusión. Allí se mezcló con los ritmos africanos, a su interpretación se le agregaron las maracas y dio por resultado la canción cadenciosa que conocemos hoy. A Costa Rica llegó a principios del Siglo XX, traído por algunos cantantes que viajaron por centroamérica, alrededor de los años 1920. Quizás los compositores de boleros nacionales más prólificos y cuyas canciones han traspasado las fronteras y grabados por cantantes famosos están Ricardo Mora, Orlando Zeledón y Ray Tico. En referenencia a los principales boleristas destacan, entre muchos otros intérpretes: Jorge Duarte, Gilberto Hernández y Rafa Pérez. Dentro de los boleros costarricenses más conocidos cabe mencionar:
Algunos de los boleros costarricenses más conocidos:
Cartaginesa: Carlos M. Hidalgo
Eso es imposible: Ray Tico (José Jacinto Herrera Córdoba)
Luna Liberiana: Jesús Bonilla Ch.
Noche inolvidable: Ricardo Mora Torres
Recordando mi puerto: Orlando Zeledón Castro
Recuérdame: Ricardo Mora Torres
Calipso limonense:
Ritmo afrocaribeño, cadencioso, cuyo origen se atribuye a las islas de Trinidad y Tobago. La ruta que siguió para llegar a Costa Rica no es bien conocida, aunque se presume que llegó primero a Jamaica y de allí lo trajeron los negros a la provincia de Limón, en donde, por lo contagioso de su ritmo y su cadencia, fue rápidamente adoptado por la población. Actualmente, los principales intérpretes son el Grupo Cantoamérica y Manuel Monestel. Dentro de los principales compositores, sin duda, destaca Walter Ferguson, una de cuyas canciones más conocidas es “Cabin in the wata”.
Algunos de los calipsos limonenses más conocidos:
Cabin in the Wata: Walter Ferguson
Espejo: Manuel Monestel
Hellen: folkor tradicional limonense
Merry Woman: Manuel Monestel
Seguirá el amor: Manuel Monestel y Virginia Grutter
Callejera:
La callejera es una variación del ritmo de pasillo, que se menciona más adelante. Su principal diferencia está, principalmente, en la temática, pues se desarrolló como manifestación urbana y su ritmo se hizo más rápido y acompasado que el pasillo, por lo que resulta en una danza muy alegre. Algunos consideran este ritmo como el más autóctono del país. Dentro de las callejeras más representativas están “La botijuela” (anónimo) y ”Morena linda” de Adán Guevara Centeno y Saturnino Cubillo. ”La botijuela es una callejera cuya coreografía recuerda a las cuadrillas españolas que a su vez fueron influenciadas por las francesas” (Alpírez).
Corrido:
Este ritmo, definitivamente mexicano, tiene su máxima expresión en nuestro folklore en la canción “Mi linda Costa Rica”, escrita por el compositor nicaragüense, Tino López Guerra, quien es autor, también, de “Viva León, jodido”, entre muchos otros corridos. Otro corrido famoso, es el “Corrido a Pepe Figueres”, cuya letra es de Carmen Granados Soto (Rafela); pero sobre la música tomada de un corrido mexicano (cover).
Danza criolla:
Este es uno de los ritmos más antiguos en el país. Llegó a través de la danza mexicana, pero en Costa Rica adquirió su propia identidad, aunque sus raíces ancestrales provienen de la danza andaluza. La danza más representativa es “Caña dulce” de José J. Salas y José Daniel Zúñiga Z.; y otras, menos conocidas como “Auroral” (Ramón Leiva C; José Daniel Zúñiga Z.) y “Añoranza” (anónimo). También se incluyen en este género canciones como:
Algunas de las danzas criollas más conocidas:
Aquel arroyito: Jesús Bonilla (Danza – Tambito)
Caminito del maizal: J. Joaquín Ureña M.
El pavo: anónimo
El punto sancarleño: Paulino Porras Hidalgo
Nayuribes: José Ramírez Sáizar, Jesús Bonilla Ch.
Santa y bella: Miguel A. Hidalgo S.
Zapateado: anónimo
Parrandera:
Género musical, de ritmo rápido y acompasado. Se origina en la Provincia de Guanacaste, donde actualmente tiene gran difusión. Es común que sean interpretadas por bandas de pueblo (cimarronas), lo que les da un colorido muy especial que hace recordar la marinera peruana. Generalmente se acompaña con marimba. Junto con el tambito, se disputan el cetro de ser el ritmo nacional. De hecho, hay algunos autores que consideran la parrandera y el tambito como un solo género musical. Según Alpírez, hay cuatro clases de parranderas: 1- Las que combinan el ritmo rápido con uno lento (Danza, contradanza o cuartillado). 2.- Las que tienen un solo ritmo rápido, alegre. 3.- Las que comienzan como una jota y pasan luego a ritmo de danza o contradanza; 4.- Las descriptivas que usan diversos ritmos según su argumento.
Algunas de las parranderas más conocidas:
10 de marzo: Tobías Sanabria
14 de enero: Freddy Navarro G.
Amores de Guardia: anónimo
Anónimo: anónima
Cambute: anónima
Charanga: anónimo
Charramanduzca: anónima
El brinco del sapo: anónimo (parrandera endiablada)
El burro e Chilo: Héctor Zúñiga Rovira
El diablo chingo: anónimo
El gamonal: Alberto Gómez
El indio enamorado: anónimo
El maja fierro: José Ramírez Sáizar; Luis Castillo C. (Música)
El punto guanacasteco: anónimo (este, considerado el baile nacional, usualmente se le separa como un ritmo aparte, dentro del género del “punto”, venido del Caribe)
Espíritu guanacasteco: Medardo Guido, Guillermo Chaves
Grito del Sabanero: Aníbal Herrera Cerdas
Hombre macho: Adán Guevara Centeno
Jesús Guanacasteco: José Ramírez Sáizar, Luis Castillo C.
La cajeta: anónimo Liberianita: Medardo Guido Acevedo
Los cuatro gatos: Guillermo Chaves Álvarez
Mi yegüita alazana: José Ramírez Sáizar; Luis Castillo C.
Morena Linda: Adán Guevara Centeno; Saturnino Cubillo
Morenitas: anónimo
Pajarito chichiltote: anónimo
Tapizca: Arnoldo Sandoval Ruíz
Ticas lindas: Mario Chacón Segura
Pasión: Roberto Arce, Pasión Acevedo Jácamo (vals parrandera)
Pasillo costarricense:
Ritmo muy popular en el folklore costarricense. Se deriva del pasillo colombiano, y fue traído al país por inmigrantes colombianos (o panameños) en la última década del S. XIX. Dentro de las canciones más conocidas en este ritmo están “Amor de temporada” (Héctor Zúñiga), “Las garzas” (anónimo) y He guardado (Aristides Baltodano; Manuel Rodríguez Caracas).
Algunos pasillos costarricenses:
Cantos de mi tierra: Luis Castillo C.
El revoltoso: Luis Castillo C.
Faruscas: Luis Castillo C.
Flor de Luna: Luis Castillo C.
Luna y mujer: José Ramírez Sáizar; Luis Castillo C
Marimba Diriá: Ulpiano Duarte Arrieta
Picadillo: Paulino Castillo Acuña
Tardes josefinas: Luis Castillo C.
Tiempal: Luis Castillo C.
Todo: José Ramírez Sáizar, Luis Castillo C.
Violines gitanos: Paulino Castillo Acuña
Punto:
Danza de origen dominicano, que se extendió luego a Cuba, Costa Rica y Panamá. En Costa Rica tiene su máxima expresión en el punto Guanacasteco, declarado baile nacional. La letra de El punto Guanacasteco, aparentemente, es una recopilación de varias estrofas populares, incluyendo una de origen hondureño (Dicen que viene Guardiola, con su tropa de pericos y dicen que no se van, hasta que claven los picos). Una de esas recopilaciones fue hecha por Leandro Cabalceta. Al punto costarricense también se le llama “baile o son suelto”, puesto que la pareja baila suelta. Normalmente, el punto no tiene letra, sino que más bien se le acompaña de las famosas “bombas”, que es un tipo de verso que se intercala cuando se interrumpe la música a solicitud de los danzarines, a modo de la copla española, la trova colombiana y es la versión tica de la payada española, ampliamente difundida en el cono sur del continente (Bolivia, Chile, Uruguay y Argentina).
Tambito:
Ritmo de música folklórica, de origen desconocido, aunque podría derivarse de la danza española. Algunos consideran éste el ritmo nacional. El nombre tambito fue acuñado por José Ramírez Saizar, en alusión al tambo, tipo de rancho que se construía en las fincas ganaderas para que los peones durmieran. Dentro de las canciones que pertenecen a este ritmo están: A mi bandera, Caballito Nicoyano (de Mario Chacón), Pasión (de Pasión Acevedo), así como las siguientes:
Algunos de los tambitos más conocidos:
Así es mi tierra: Mario Chacón
El Chito: Luis Castillo
El torito: Anónimo (libre. De TRP)
Fidela: Manuel Abarca
Fiesta en la villa: Henry Porras González
Fiesta en San José: Luis Castillo C.
Flor de café: Luis Castillo C.
Guarito ´e caña: Mario Chacón S
La carreta y la lluvia: Freddy Calvo Chaves
Mi novia linda: Mario Chacón S.
Nayuribes: José Ramírez Sáizar; Jesús Bonilla C. Pasión (Pertenece a este ´ritmo, según Jaime Rico)
Música según región
De acuerdo con Paulina Peralta, una de las más reconocidas musicólogas costarricenses, y experta en danza, cada región del país ha desarrollado su propia identidad musical a través de los ritmos anteriores. Según su enumeración:
San José: vals, aunque, por su caracter de capital, han confluido aquí todos los demás ritmos y géneros musicales.
Heredia: vals y tambito.
Cartago: mazurca, vals y polka.
Alajuela: vals y pasillo.
Puntarenas: pasillo, parranderas, cumbias de influencia colombiana y bolero.
Guanacaste: parrandera, punto, danza, contradanza y otros.
Limón: calipso y cuadrillas (la que se usa para acompañar las comparsas de carnaval).